Akira Toriyama es un dibujante y guionista japonés mundialmente conocido por Dragon Ball, su obra más popular. Al parecer Toriyama acabó un tanto cansado de Son Goku y compañía, por lo cual decidió tomarse un descanso hasta recuperarse del duro trabajo que supuso esa serie hasta encontrar las ganas y la inspiración de hacer algo nuevo.
Cowa! Fue su primera obra más o menos larga tras Dragon Ball, así que eran muchas las expectativas que había en el autor nipón. Sin embargo, gracias a que Toriyama no suele salirse de sus propios límites en términos de innovación, un simple dibujo sirvió para indicar que lo que nos íbamos a encontrar no seguiría el estilo de los últimos años de Dragon Ball, si no que retomaría el estilo de obras anteriores como Dr. Slump, serie que tomaba lugar en la Villa del Pingüino, un extraño pueblo habitado por monstruos, robots, animales que hablan y extraterrestres.
Siendo consciente de esa similitud, el propio Toriyama hizo algunas ilustraciones que recordaban a su antigua obra, siendo la más evidente la que se utilizó como portada de la primera edición española del manga, donde vemos a los protagonistas de Cowa! Paifu (o Paifuu) y José Rodríguez en una imagen que nos recuerda a las alocadas carreras de Arale Norimaki (protagonista de Dr. Slump) y su acompañante Gatchan (Gajira).
¡BUENAS NOCHES DESDE CABO MURCIÉLAGO!
Cabo Murciélago es un pequeño pueblo alejado de las grandes ciudades donde conviven fantasmas, animales y humanos, pese a sus diferentes hábitos (los fantasmas son nocturnos) y creencias (a los fantasmas les dan miedo las cosas alegres y bondadosas). Si no fuese por esa particularidad, el pueblo sería como cualquier otro con sus tiendas, escuelas y niños correteando de acá para allá tras salir del colegio.
Dos de esos niños son Paifu (un niño mitad vampiro-mitad Koala) y José Rodríguez (un fantasma con la habilidad de cambiar de forma) los cuales pasan la noche haciendo travesuras o jugando.
Ambos personajes son totalmente opuestos entre sí: Paifu es decidido, mentiroso, inconsciente, bastante mandón, bondadoso a veces (pese a que se avergüence de ello) y debido a su naturaleza mestiza, se convierte en un agresivo hombre koala cuando ve una cruz. José Rodríguez es tímido, sincero, indeciso y tan cobarde que cuando pasa miedo no puede dejar escapar una de sus sonoras ventosidades.
EL INICIO DE LA AVENTURA
Uno de los juegos favoritos de Paifu (pero no de José) es hacer pruebas de valentía, las cuales son algo ridículas si tenemos en cuenta que ambos son fantasmas y por lo tanto, pocas cosas deberían darles miedo. Sin embargo no hay que olvidar que son niños, por lo cual hacer cualquier cosa que saben que no han de hacer ya es una valerosa hazaña por insignificante que sea. Una de esas pruebas de valentía consistió en espiar una caseta que hay a las afueras del poblado, donde vive un humano del cual se dice que es un asesino. Dicha prueba terminó con el inevitable encuentro accidental entre estos dos niños y el humano, el cual no resulta ser tan malo como lo pintan, pese a tener un fuerte temperamento.
La relación entre ambos fantasmas y el humano (Mako Maruyama) se volverá mucho más fuerte cuando una enfermedad letal (que solo afecta a los fantasmas) llegue a Cabo Murciélago, momento en el cual necesitarán la ayuda de Maruyama para poder ir a casa de una bruja a pedirle la medicina antes de que la epidemia se cobre sus primeras víctimas.
Como no podía ser de otro modo, Maruyama hará su viaje acompañado por Paifu, José y otro niño fantasma llamado Aapon, los cuales mostrarán que pese a ser niños pueden ser realmente útiles gracias a sus habilidades sobrenaturales, y es que toda ayuda es poca cuando hay que recorrer un largo camino que incluye varias ciudades, un desierto y un bosque donde dicen que habita un monstruo muy peligroso.
CONCLUSIÓN Y RECOMENDACIONES
Cuando compré Cowa! solo esperaba encontrarme al Toriyama que conocí en Dr. Slump y en la primera etapa de Dragon Ball (correspondiente a Goku cuando era niño) pues ya estaba más que harto de «combates invisibles” y Kame Hames capaces de destruir planetas, así como de los niveles de super saiyan y enemigos que regeneran o absorben a sus rivales con tal de alargar innecesariamente la historia.
En ese sentido el manga no me decepcionó, su estilo desenfado y sus curiosos personajes lo hacen muy entretenido, aunque se note a la legua que está enfocado a un público más infantil que juvenil y en general no alcance el nivel de calidad (ni locura) de Dr. Slump. Los fans de Toriyama verán que existen múltiples guiños a sus obras más conocidas, algunos muy sutiles y otros extremadamente descarados (como el familiar aspecto del ayudante de la bruja).
Recuerdo que cuando terminé de leer Cowa! me quedé con ganas de más, me habría encantado conocer algo más sobre el resto de habitantes de Cabo Murciélago y ver qué es lo que sucede con Paifu y sus amigos. Aunque siempre tuve esperanzas de que Toriyama recuperase estos personajes en algún momento de aburrimiento, me temo que eso no va a suceder a corto plazo, ya que los nuevos quehaceres del autor nipón vuelven a estar ligados a Dragon Ball en un sentido u otro.
Si queréis conocer algo más a Paifu y José Rodríguez, lo único que os puedo recomendar es el manga Cowa! que afortunadamente fue publicado fuera de Japón en un tomo autoconclusivo. Debido al renombre de su creador y a que desde hace unos años se están reeditando algunas de sus obras cortas, no creo que sea demasiado difícil de conseguir.