Anima Flux se presenta como una nueva propuesta en el género de los metroidvanias cooperativos. Desarrollado por el estudio independiente del mismo nombre (Anima Flux), este título busca combinar elementos tradicionales del género con algunas innovaciones interesantes. Ambientado en un futuro distópico, el juego promete una experiencia que mezcla exploración, combate y narrativa en un paquete diseñado tanto para el juego en solitario como para el cooperativo. Como alguien familiarizado con el género, me dispuse a explorar lo que Anima Flux tiene para ofrecer, con la curiosidad de ver si logra destacar en un mercado cada vez más saturado de propuestas independientes.
Lanzado el 7 de octubre de 2024, Anima Flux se presenta como un metroidvania cooperativo que promete una experiencia única. Después de pasar varias horas explorando sus intrincados niveles y desentrañando su narrativa distópica, puedo afirmar que este juego tiene mucho que ofrecer, tanto para los fanáticos del género como para aquellos que buscan una experiencia cooperativa fresca y desafiante.
Un Mundo Distópico que Cobra Vida
Lo primero que me cautivó de Anima Flux fue su ambientación. El juego nos sumerge en un futuro sombrío donde la humanidad se encuentra al borde de la extinción. La única ciudad humana que queda se encuentra en una arca espacial, un último bastión de esperanza en un universo hostil. Esta premisa, aunque no es completamente original, se presenta de una manera tan vívida y detallada que es imposible no sentirse inmediatamente inmerso en su mundo.
Los desarrolladores han hecho un trabajo excepcional en la creación de un ambiente que respira autenticidad. Cada rincón de la ciudad arca cuenta una historia: las paredes metálicas desgastadas, los cables expuestos, las luces parpadeantes, todo contribuye a crear una sensación de decadencia y desesperación. Es un futuro que se siente tangible, un lugar donde la tecnología avanzada coexiste con la miseria y la desesperanza.
La dirección artística merece una mención especial. Los escenarios están diseñados con un estilo que evoca los clásicos de ciencia ficción de los años 80 y 90, pero con un toque moderno que los hace sentir frescos y únicos. Los colores son vibrantes cuando necesitan serlo, creando un contraste impactante con los tonos más sombríos que dominan gran parte del juego. Esta paleta de colores no solo es estéticamente agradable, sino que también sirve para guiarte a través de los intrincados niveles.
Pero lo que realmente da vida a este mundo son los detalles. Los NPCs que encontramos, aunque no son numerosos, están bien caracterizados y ofrecen diálogos que enriquecen la narrativa. Los registros de texto dispersos por el mundo añaden capas de profundidad a la historia, revelando poco a poco los eventos que llevaron a la humanidad a su situación actual. Cada pieza de información se siente valiosa, motivándote a explorar cada rincón en busca de más pistas sobre este fascinante universo.
Una Narrativa que Engancha
La trama de Anima Flux es uno de sus puntos fuertes. Nos pone en el papel de dos soldados genéticamente mejorados, agentes especiales de un régimen teocrático dictatorial. Nuestra misión: salvar la última ciudad humana de una invasión de mutantes. Pero, como es de esperar en una buena historia de ciencia ficción, nada es tan simple como parece.
A medida que avanzamos en la historia, nos encontramos cuestionando no solo nuestra misión, sino también nuestra propia existencia. El juego aborda temas complejos como la identidad, el libre albedrío y el costo de la supervivencia. ¿Hasta dónde estamos dispuestos a llegar para salvar a la humanidad? ¿Y qué significa realmente ser humano en un mundo donde la tecnología puede transferir nuestras «animas» de un cuerpo a otro?
La narrativa se desarrolla a través de una combinación de diálogos en el juego, escenas cinemáticas y los mencionados registros de texto. Las escenas cinemáticas, en particular, son muy buenas. Están animadas con un estilo que recuerda a las series de anime de ciencia ficción clásicas, añadiendo un toque de nostalgia que complementa perfectamente la estética general del juego. De hecho, lo primero que me recordó es a Aeon Flux, una vieja animación clásica que pasaban en MTV, ¿la recuerdan? No creo que el nombre de este juego y su parecido estético con esa serie sean casualidad.
Sin embargo, debo mencionar que la historia, aunque intrigante, a veces puede sentirse un poco abrumadora. Hay muchos conceptos y términos específicos del mundo que se introducen rápidamente, y en ocasiones me encontré deseando que hubiera un glosario o una forma más fácil de revisar la información que ya había descubierto.
Jugabilidad: Un Equilibrio entre Cooperación y Desafío
El corazón de Anima Flux y de cualquier metroidvania en general reside en su jugabilidad, y es aquí donde el juego destaca bastante. Como metroidvania cooperativo, ofrece una experiencia única que combina la exploración no lineal característica del género con mecánicas de juego diseñadas para dos jugadores.
Los dos personajes jugables, un hombre especializado en combate cuerpo a cuerpo y una mujer experta en combate a distancia, ofrecen estilos de juego complementarios. Esta dualidad es fundamental para la experiencia de juego, ya sea que estés jugando solo/a o con un amigo.
En el modo individual, puedes cambiar entre los dos personajes a voluntad, lo que añade una capa adicional de estrategia a la exploración y el combate. Encontré particularmente satisfactorio alternar entre los personajes para resolver puzles o enfrentar diferentes tipos de enemigos. Sin embargo, debo admitir que hubo momentos en los que la IA del personaje que no estaba controlando se comportaba de manera errática, lo que ocasionalmente llevó a situaciones frustrantes.
El modo cooperativo local es donde Anima Flux realmente brilla. Jugar con un amigo en el mismo teclado (o con mandos, si lo prefieres) añade una dimensión completamente nueva a la experiencia. La coordinación necesaria para superar obstáculos y derrotar enemigos se siente gratificante, y los momentos de triunfo compartido son verdaderamente memorables.
El sistema de combate es robusto y satisfactorio. Cada personaje tiene un conjunto único de habilidades que se pueden mejorar a lo largo del juego. El personaje masculino, con su enfoque en el combate cuerpo a cuerpo, requiere un acercamiento más táctico y arriesgado. Por otro lado, el personaje femenino, con su arco, permite un estilo de juego más calculado y a distancia.
Una mecánica interesante es el «modo ira«, que permite a los personajes realizar ataques más poderosos por un corto período de tiempo. Esta habilidad añade un elemento de gestión de recursos al combate, ya que debes decidir cuándo es el momento óptimo para activarla.
La progresión de los personajes se siente bien balanceada. A medida que avanzas en el juego, desbloqueas nuevas habilidades y mejoras que no solo hacen que tus personajes sean más poderosos, sino que también abren nuevas formas de interactuar con el entorno y resolver puzles. Este aspecto de «metroidvania» está bien implementado, motivándote a volver a áreas previamente inaccesibles para descubrir secretos y coleccionables.
Hablando de coleccionables, Anima Flux ofrece una buena variedad. Desde registros de texto que expanden la historia hasta contenedores de biomaterial que funcionan como moneda del juego, siempre hay algo que buscar. Sin embargo, debo mencionar que la falta de un sistema para marcar coleccionables en el mapa puede resultar frustrante para los completistas.
El diseño de niveles merece una mención especial. Los desarrolladores han creado un mundo interconectado que invita a la exploración. Cada área se siente única, con sus propios desafíos y secretos. La verticalidad de los niveles añade una dimensión adicional a la exploración, y descubrir nuevos atajos y conexiones entre áreas es siempre satisfactorio.
Sin embargo, el sistema de viaje rápido, que se basa principalmente en elevadores que conectan las diferentes áreas con un centro central, puede resultar un poco tedioso a veces. Moverse entre áreas distantes puede llevar más tiempo del que me gustaría, especialmente cuando estás buscando coleccionables o intentando completar misiones secundarias.
Los jefes son otro punto destacado del juego. Cada encuentro con un jefe se siente único y desafiante, requiriendo que utilices todas las habilidades que has aprendido hasta ese momento. Los diseños de los jefes son impresionantes, con criaturas grotescas que parecen salidas de una pesadilla biomecánica. Derrotar a estos monstruos se siente verdaderamente gratificante, especialmente en el modo cooperativo donde la coordinación con tu compañero es crucial.
Un Festín Visual
Ya he mencionado la dirección artística de Anima Flux, pero vale la pena profundizar un poco más en este aspecto.
Los personajes principales están bien diseñados, con animaciones fluidas que hacen que el combate y la exploración se sientan dinámicos y satisfactorios. Los enemigos, desde los más pequeños hasta los jefes más imponentes, tienen diseños únicos y memorables que encajan perfectamente en el mundo distópico del juego.
Los efectos visuales durante el combate y al usar habilidades especiales son espectaculares, añadiendo un toque de dramatismo a cada encuentro. Las explosiones de energía, los rastros de las flechas y los destellos de las armas cuerpo a cuerpo crean una sinfonía visual que nunca deja de impresionar.
El diseño de sonido complementa bien los visuales. Los efectos de sonido son nítidos y satisfactorios, desde el zumbido de las armas de energía hasta el crujido de los huesos al golpear a un enemigo. La banda sonora, aunque no es particularmente memorable, hace un buen trabajo estableciendo el tono para cada área y situación.
Las voces de los personajes, aunque limitadas principalmente a gruñidos y exclamaciones durante el combate, añaden personalidad a los protagonistas. Los diálogos más extensos durante las escenas cinemáticas están bien actuados, aunque ocasionalmente pueden sonar un poco rígidos.
Desafíos Técnicos y Áreas de Mejora
A pesar de sus muchas fortalezas, Anima Flux no está exento de problemas. Durante mi tiempo con el juego, encontré algunos problemas técnicos que, aunque no arruinaron mi experiencia, sí causaron cierta frustración.
Como mencioné anteriormente, la IA del personaje que no estás controlando en el modo individual a veces puede ser problemática. Hubo momentos en los que mi compañero/a se quedaba inmóvil en situaciones peligrosas o no respondía adecuadamente a mis comandos. Aunque esto no arruina la experiencia, sí puede llevar a algunas muertes frustrantes.
El sistema de viaje rápido, aunque temáticamente apropiado, puede resultar un poco engorroso. Tener que navegar a través de múltiples elevadores para llegar a áreas distantes puede ralentizar el ritmo del juego, especialmente cuando estás tratando de completar misiones secundarias o buscar coleccionables.
La falta de un sistema para marcar coleccionables en el mapa es otra área que podría mejorarse. Para un juego que incentiva la exploración y la recolección, no tener una forma fácil de rastrear qué áreas has completado puede ser frustrante para los jugadores más meticulosos.
Finalmente, aunque la historia es intrigante, la forma en que se presenta puede ser un poco abrumadora al principio. Una introducción más gradual a los conceptos y la terminología del mundo del juego podría ayudar a los jugadores a sumergirse más fácilmente en la narrativa.
Conclusión: Una Experiencia que Vale la Pena
A pesar de sus imperfecciones, Anima Flux es un juego que me ha dejado una buena impresión. Es un título ambicioso que logra combinar con éxito elementos de diferentes géneros para crear una experiencia única y satisfactoria.
La narrativa distópica, aunque compleja, es fascinante y te mantiene enganchado. El mundo que han creado los desarrolladores es rico en detalles y misterios, invitándote constantemente a explorar más y descubrir sus secretos.
La jugabilidad, especialmente en modo cooperativo, es donde Anima Flux realmente brilla. La sinergia entre los dos personajes jugables crea oportunidades para estrategias interesantes y momentos de triunfo compartido. El combate es satisfactorio y desafiante, y la progresión de los personajes te mantiene motivado/a para seguir mejorando tus habilidades.
Sí, hay áreas que podrían mejorarse. Los problemas técnicos ocasionales, el sistema de viaje rápido algo tedioso y la falta de algunas características de calidad de vida como el marcado de coleccionables en el mapa son aspectos que los desarrolladores podrían abordar en futuras actualizaciones.
Sin embargo, estas imperfecciones no disminuyen significativamente lo que es, en general, una experiencia de juego sólida y satisfactoria. Anima Flux es un juego que toma riesgos, que se atreve a hacer algo diferente dentro del género metroidvania, y en gran medida, estos riesgos dan sus frutos.
Para los fanáticos de los metroidvanias, los juegos cooperativos o simplemente aquellos que buscan una experiencia de ciencia ficción única, Anima Flux es una propuesta que no debe pasar desapercibida.
