Kingdom of Night estalla como un ritual fallido en las calles neón de Miami, Arizona, donde un grupo de adolescentes enfrenta demonios invocados por un culto en plena fiebre ochentera. Desarrollado por
Friends of Safety y lanzado este pasado 2 de diciembre de 2025, este ARPG isométrico me lanzó a una noche eterna de caos sobrenatural, con combates viscerales y un mundo interconectado que evoca Stranger Things mezclado con Diablo. Recorrí alcantarillas fúngicas y calles magenta, salvando amigos mientras el apocalipsis teen se desata, y aunque su ambición indie deja algunas asperezas, el núcleo nostálgico y adictivo me tuvo enganchado en cada hora de exploración.
La trama: Una noche de cultos, amigos y fin del mundo
En 1987, un ritual satánico libera a Baphomet en el tranquilo Miami, Arizona, transformando el pueblo en un infierno demoníaco. Controlas a John, un chico común que, luego del secuestro de su vecina, sale a rescatar a sus colegas hora por hora en una carrera contra el amanecer. La historia entreteje drama con horror cósmico: rivalidades escolares, amores prohibidos y una secta que oculta motivos siniestros.
El lore del juego se despliega en quests abiertas: diarios ocultos y diálogos con NPCs pintan un tapiz de misterio que premia curiosear, culminando en giros que cuestionan la realidad misma. Es un relato que abraza sus inspiraciones sin copiar, priorizando emociones crudas sobre twists forzados.
Jugabilidad: Hack’n’slash táctico con clases y sinergias
El combate en tiempo real brilla con lock-on intuitivo, melee fluido, dodges y parrys que castigan tus errores pero recompensan tu maestría, por lo que es ideal jugarlo con gamepad, salvo que seas un maestro del teclado. Eliges clases al inicio –de guerreros brutos a magos ágiles– y puedes alternar con un compañero en multijugador local para ejecutar combos devastadores. Exploras un mapa expansivo e interconectado, con quests no lineales que fomentan builds variadas: loot, upgrades y sinergias mantienen la frescura en las hordas demoníacas.
El ritmo hora a hora añade urgencia, pero sin abrumar (y menos mal, porque odio el estrés de que me apuren), y sus bosses épicos exigen tácticas, aunque el hecho de tener algunos enemigos repetitivos puede lastrar un poco el resultado final. Sus checkpoints generosos y su dificultad escalable lo hacen accesible, y te llevará unas 15-20 horas para completarlo al 100%, perfecto para fans de los ARPG retro.



Gráficos y atmósfera: Pixel art neón que hipnotiza en la oscuridad
El pixel art vibrante captura la era: calles iluminadas por fuegos magenta, alcantarillas con hongos verde neón y un pueblo decadente que palpita con vida ochentera. La iluminación oscura genera paranoia constante, con detalles gore viscerales que realzan el horror cósmico. El juego corre muy suave en configs medias, así que no necesitas una súper computadora para jugarlo, no necesita el infame UE5.
La atmósfera es su gancho: un limbo suburbano donde lo cotidiano vira pesadilla, evocando VHS perdidos con maestría indie.
Sonido y banda sonora: Suspense que eriza la piel
La OST creepy, con ecos industriales y motivos ochenteros, amplifica la tensión: música que pasa de sutil a frenética en combates, SFX como crujidos demoníacos que sumergen. Los diálogos y la narración en off transmiten urgencia teen, bien al estilo Stranger Things.



Opinión personal: Nostalgia con alma indie, listo para brillar
Kingdom of Night sorprende por su pasión: su combate sólido, mundo vivo y narrativa emotiva lo elevan por encima de muchos indies, y en Steam ya se está ganando unas cuantas reseñas positivas de parte de los usuarios. Por mi parte, me encantó su frescura retro, aunque la experiencia general se diluye en secciones repetitivas y pide un poco de pulido en el combate. Si no tienes un gamepad, jugarás en modo hardcore por culpa del sistema de control.
Conclusión: Entra en la noche si anhelas horror retro con corazón
Kingdom of Night es un debut indie que captura la magia ochentera en PC, ideal para sesiones intensas de demonios y amistad. Si te tienta jugar un ARPG con alma Stranger Things, no lo dudes. ¡Y dime en los comentarios cuál es tu clase favorita!







